¿Cómo ser un buen líder en época de crisis?

Ser un buen líder requiere de ciertas aptitudes para manejar adecuadamente las necesidades humanas de los equipos, así como para cumplir los objetivos de la empresa. La presencia de buenos managers en las organizaciones es clave para liderar el éxito de los negocios, y sobre todo en épocas de crisis.

Ser un buen lider | Cofidis Retail

La situación de crisis mundial actual ha traído consigo grandes retos a los que los líderes de las empresas han tenido que hacer frente para apoyar y guiar a sus trabajadores, el motor de los proyectos empresariales.

Y actuar en tiempos de crisis implica adaptarse a los tiempos de manera inmediata y encontrar soluciones rápidas y efectivas para mantener a flote los negocios. Para ayudar a esas personas que consiguen que los equipos no decaigan, hoy vamos a ver cómo potenciar la figura del líder.

¿Qué se necesita para ser un buen líder?

La actuación de los managers y directivos debe ser firme y persistente a la hora de afrontar una crisis. Así, podríamos definir un liderazgo resiliente a través de estos cinco rasgos:

1. Corazón y cabeza

Por un lado, se necesita poner el corazón para empatizar con los empleados, ponerse en su piel y comprender sus miedos, sus dudas, sus necesidades. Tener en cuenta el lado humano en una crisis sanitaria es imprescindible. Asegura la protección de los empleados cuidando su salud, seguridad y su trabajo.

Por otro lado, también es necesario ser firme y racional para garantizar el rendimiento de la empresa. Ten en cuenta que en ocasiones la situación te pedirá tener mente fría y actuar de manera objetiva para proteger los intereses económicos del negocio.

2. Compromiso total

Tu misión es ser capaz de estabilizar su empresa durante una crisis. Tendrás que comprometerse con el cuidado de la empresa. Por eso, tienes que estar dispuesto a hacer sacrificios y a esforzarte al máximo, igual que todos los demás. Tu prioridad es velar por la seguridad de tus trabajadores y de tu negocio.

3. Rapidez y agilidad

En tiempos de crisis es vital el tiempo de respuesta. Si es posible, anticípate. Si no has podido hacerlo, toma acción cuanto antes. Un líder resiliente tendrá que estar preparado para tomar medidas decisivas en el corto plazo y para responder a la mayor brevedad posible. No permitas que los rumores aparezcan entre tus empleados o clientes. Anticípate comunicándote de manera proactiva para evitar que se ideen problemas internos y externos en la compañía.

4. Comunicar con transparencia

Es fundamental tomar la iniciativa en la comunicación y ser lo más honestos posibles con la situación actual, tanto con tus públicos externos como internos. Crea un discurso realista, pero a la vez tranquilizador y motivador para que tus empleados sepan que estás ahí y que se están tomando las medidas necesarias para salir adelante. Asegúrate de poner a su disposición canales de comunicación abiertos permanentemente, a través de los cuales puedas hacerles llegar todas las noticias y novedades para mantenerlos actualizados. Lo mismo con tus clientes.

5. Mira hacia el futuro

Ocúpate del presente y mira hacia el futuro. Todo líder debe preservar su visión a largo plazo para poder anticiparse a las oportunidades y novedades que puedan surgir en el tiempo. Busca casos de éxito y best practices de aquellas empresas que estén resurgiendo y manejando con éxito la crisis dentro de sus negocios. Rodéate de profesionales y expertos que puedan aportar su visión y conocimientos para asegurarte de tomas las mejores decisiones.

 

¿Cómo puedes apoyar a tus empleados durante la pandemia?

Cada persona es un mundo. Por eso es importante hablar directamente con tus empleados para saber cuáles son sus necesidades reales y poder ofrecerles el apoyo que necesitan. No obstante, existen cuatro factores indispensables para respaldar a tus colaboradores en tiempos de crisis:

Flexibilidad y conciliación

En momentos complicados se necesita ser lo más flexible posible. Permite que tus colaboradores trabajen donde más cómodos se sientan. Si es en oficinas, asegúrate de acondicionar el espacio y cumplir con la normativa covid para que se sientan seguros. Si prefieren teletrabajar, permite que trabajen desde casa, es su espacio de confianza y donde se sentirán más a salvo. Asegúrate de que disponen del material y las herramientas necesarias para realizar su trabajo estén donde estén.

Teletrabajo | Cofidis Retail

Ten en cuenta que la conciliación de la vida laboral y familiar teletrabajando trae consigo tanto ventajas como inconvenientes para aquellos que tienen hijos o familiares a su cargo. Comprende su situación y ofrece facilidades para compaginar su vida con su trabajo. Está demostrado que los colaboradores que tienen acuerdos de trabajo flexibles están significativamente más comprometidos y motivados que aquellos que trabajan siempre desde oficinas.

Empatía y comunidad

Es vital transmitir un sentido de pertenencia en momentos difíciles. Hazles saber a tus colaboradores que no están solos, que estáis todos juntos en esto y que disponen de vuestra atención para cualquier asunto que requieran. Mantén a tus equipos emocionalmente activos y conectados, ya sea presencialmente o a través de canales online.

Encuentra maneras de comunicarte con ellos regularmente agendando un encuentro virtual semanal, por ejemplo. Puede ser un espacio para compartir sensibilidades, actualizar noticias, celebrar los logros y agradecer todo su esfuerzo.  Es vital que sientan su labor y trabajo reconocido cuando lo están dando todo.

Refuerzo estratégico

Es posible que el flujo de trabajo cambie, así como el estado de los colaboradores. Para ello, identifica qué departamentos y equipos necesitan mayor refuerzo. Aumenta el apoyo a los managers inmediatos realizando reuniones semanales que te permitan supervisar el día a día de la empresa y estar a su lado para ayudarles en la toma de decisiones importantes. Sentirse acompañados reforzará su confianza y poder trabajar conjuntamente será beneficioso para coordinaros, establecer prioridades estratégicas, implementar cambios y dar respuesta rápida a las necesidades que surjan dentro de los equipos.

Cuando conoces de cerca la realidad interna de tu empresa, podrás concentrarte en potenciar las fortalezas y reforzar las debilidades para poder seguir ofreciendo un servicio y apoyo de calidad, tanto para tus colaboradores como para tus clientes. Haz lo mismo con aquellos clientes y proyectos que requieran de un refuerzo extra. Prioriza las necesidades del momento y revisa las acciones que toma la empresa.

Recuerda: con un enfoque adecuado y una gestión rápida, una crisis puede convertirse en una oportunidad para seguir avanzando

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